Cuando las personas piensan adquirir una mascota generalmente lo primero que llega a sus mentes es que sea linda y que luzca tanto en casa como en el parque, lamentablemente, pocos son aquellos que analizan costos y espacio para el bienestar del que será, nuestro/a compañero durante los próximos años. Es realmente fundamental saber con qué espacio físico y disponibilidad de tiempo contamos, ya que podemos ser los más capacitados criadores pero sin esos dos elementos la vida de ese pobre animalito se tornara espantosa. Una filosofía muy valedera es la de pasar por un “periodo de embarazo”, si, como lo oyen, no es nada literal, más bien se trata de figurar en nuestras cabezas la llegada de un nuevo ser, pues claro, al fin y al cabo nuestra futura mascota será un nuevo ser en nuestra vida, y un miembro más de la familia. Para esto, se lo dividirá en tres etapas:
- La Disposición.- En esta etapa se toman las decisiones, es cuando la familia, grandes y chicos, hablan de la disponibilidad de su tiempo (horarios, obligaciones, tiempo libre) la disponibilidad de espacio (casa, departamento, patios grandes, parques cercanos), el presupuesto (accesorios, alimentación, veterinario) y según eso se decide el tipo de mascota más adecuado para la familia y muy importante, el sexo de esta.
- Las Providencias.- En esta etapa se planifica, se hace los preparativos, todos aprenden más acerca del nuevo miembro que pronto se sumara al clan, se consulta todo sobre sus cuidados (por medio del veterinario, en internet, foros, paginas especializadas), se hace las adecuaciones necesarias en la casa, se designa espacios específicos (casas, cajas de arena, urnas de vidrio para roedores pequeños, camas para conejos y cuyes, jaulas, peceras en maduración para acuario, etc) es natural el derroche de ilusión en esta etapa, pero es importante no dejarnos llevar por el “obviar ciertos detalles” por lo que el empaparse de información y seguir todos los buenos consejos será nuestra mejor arma.
- La Llegada.- En esta etapa se ultima detalles, se averigua acerca de los antecedentes de nuestro nuevo amiguito, estado de salud, anteriores dueños (si los hay), alergias conocidas, vacunas, desparasitaciones, tiempos de cuarentena (para mamíferos pequeños, peces, aves, invertebrados y- reptiles1-), carnets y calendarios sanitarios (vacunas, desparasitaciones), métodos de identificación (collares con placa, chips) Y ahora sí, ya podemos compartir y conocer a nuestro nuevo amiguito/a, Pero siempre tomando en cuenta todos los consejos que nos dieron acerca del cuidado y respetando los horarios de comida y paseo ya antes dispuestos.
1.- Recuerda que los animales silvestres NO SON MASCOTAS. Los únicos reptiles que se comercializan en Ecuador de forma parcialmente legal son las tortugas Jicoteas o también llamadas colombianas (Trachemys callirostris o tortuga de orejas amarillas o rojas) ojo con esta especie porque en vida libre llega a ser una gran amenaza para el ecosistema de nuestro país. Y los únicos invertebrados son los acuáticos (cangrejos, camarones, gambas, caracoles, etc.). También se encuentran anfibios pero que no son originarios de Ecuador como: Axolote y la rana Xenopus que no representan una amenasa mayor.
Sencillamente con este “periodo de embarazo” lo que se intenta lograr es una conciencia pura al cuidado de nuestro nuevo miembro familiar, cuida y ama a tu mascota.